...Hiere quien no piensa si con lo que hace hiere...
Quien cree que lo sabe todo y los demás no saben nada...
Quien está convencido de que es más y los otros menos...
Quien no deja hablar y no sabe escuchar cuando le hablan...
Hiere quien no se pone nunca en el lugar del que está enfrente...
Quien actúa con soberbia...Con prepotencia...Con maldad...
Quien hace daño y no siente encima el peso del daño que hizo...
Quien piensa que tiene que llegar siempre el primero...
Hiere quien cree que solo él sabe elegir el y se equivoca el resto...
Quien desconfía de las buenas intenciones que otros tienen...
Quien se empeña en poner a prueba los límites de la paciencia...
Quien juega a vulnerar los sentimientos de los demás...
Hiere quien piensa que solo su vida es interesante y ninguna otra más...
Quien puede dar una palabra de ánimo y no la da...
Quien puede tender una mano y la guarda en el bolsillo...
Quien se avergüenza de que otros lloren y de llorar...
Hiere quien amenaza...Quien alecciona...Quien es duro cuando habla...
Quien ridiculiza y se ríe sin consideración ni piedad...
Quien piensa que tiene derecho a que le den todo sin él dar...
Quien solo cuida lo suyo y descuida lo común...
Hiere quien no sabe querer ni permite que le quieran...
Quien levanta muros para que ningún corazón entre en su corazón...
Quien no valora...Quien no agradece...Quien desprecia...
Quien sabe que está hiriendo y aún quiere herir más...
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Es verdad, en nuestro mundo muy pocas personas que demuestran sencibilidad, más puede la dureza y el afán de pisotear a los débiles. Un abrazo Lola.
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