...No existen los cocos...Ni los ogros...Ni los miedos...
Ni hombres que meten a los niños en sacos...
Ni brujas malas que te atrapan y te meten en un caldero...
No existen las palabras que brotan para hacer daño...
Ni el odio que maltrata el alma con rencores y silencio...
Ni las manos que golpean y dejan dolorido el cuerpo...
No existen las vidas rotas...Ni los sueños imposibles...
Ni las ilusiones locas...No existen...No tengas miedo...
Crece...Hazte grande y busca siempre muy bien...
Entonces verás que existen las manos que ayudan...
Los dedos que secan y apartan de tu cara las lágrimas...
Las palabras que curan...Protegen...Impulsan y calman...
Que hay corazones que solo saben dar todo sin esperar nada...
Que la vida es hermosa cuando el alma es grande y generosa...
Que si das fuerza serás fuerte...Que si regalas calor sentirás calor...
Y recuerda siempre que no puedes ser nunca coco...Ni bruja...
Ni hombre malo...Ni mano que golpea...Ni palabra que daña...
Ni miedo que paraliza y asusta...Ni sueño imposible...Ni rencor...
Que no puedes hacer a ningún alma heridas...A ningún corazón...
Que tendrás una vida feliz si desde niño aprendes a dar amor...
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Dar amor mucho amor a los niños que tanto lo necesitan, porque si crecen con amor, el día de mañana serán unos adultos que repartirán amor porque es lo que han recogido ellos.
ResponderEliminarPreciosa tu entrada, Lola.
Un beso.
Mi querida Lola cuando uno da amor sin más la vida le entrega amor ya que es una onda de energía que hace que las personas afines se comuniquen con mayor felicidad.
ResponderEliminarAsí que no dejemos de dar amor y seremos más felices.
Besos de luz .
Querida Lola, el amor es la fuente de vida. Quien da, recibe.
ResponderEliminarMil gracias por tus palabras, disculpa que no te pude responder rápido. Este año es el peor día de las Madres que pasaré…mi madre se nos va.
Abrazos calurosos.
Me emocioné leyendo tus letras Lola, un maravilloso texto de amor, de esperanza.
ResponderEliminarUn beso.