...Nunca le gustaron las etiquetas...
Pero si hubiera tenido que decir algo de si misma quizá la palabra más acertada hubiera sido...Insaciable...
Tenía la necesidad de llenarse continuamente...Sin límites...
Después de una cosa siempre venía otra...Y otra más...
Era ya muy tarde...Como siempre...Cuando se metió en la cama...
Cerró los ojos y se abandonó plácidamente a la sonrisa...
Estaba satisfecha...Un día más se iba a dormir llena a rebosar...
El amanecer más prodigioso y lleno de luz que podía recordar...
Aquel montón de caricias que tanto había estado necesitando...
El suave roce de la brisa en la cara cuando caminaba de vuelta a casa…
El olor dulce y penetrante que brotó de lo más hondo al cortar la naranja…
La caprichosa grafía de las gotas de lluvia trazándole formas en los zapatos…
Las huellas perfectas y efímeras que dejaron en la playa sus pies descalzos…
La consciencia de que el corazón seguía latiéndole dentro brioso…
Todo aquello que había saboreado con pasión era suyo para siempre…
Ya nadie se lo podía quitar…
Sin darse cuenta se fue quedando dormida…Plena…Feliz…Satisfecha…
Pero deseando que de nuevo amaneciera para volver a llenarse de aquella intensidad que hace a las pequeñas cosas maravillosas e inolvidables…
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Sentimientos que fluyen, pensamientos que se encuentran y los sueños buscando la realidad. Abrazucos
ResponderEliminarQuien consiga aprender a ser y a estar en esta vida en perfecta armonía con todos los elementos que contiene siendo y estando en plena consciencia... la habrá aprovechado para subir de nivel en el largo recorrido que habremos de hacer por los caminos y en los espacios de la existencia...
ResponderEliminarAbrazo