
...Me arrastras a tu destino con la fuerza y la pasión de un tango fatal...
Me haces bailar...de puntillas...en la palma de tu mano...
Vuelo...una y otra vez hacia ti...sin poderlo evitar...
Quiero dejar de ser niña en tus ojos y ser mujer en tu aliento hasta agotarme...
Sentir que me lates dentro...que eres la locura y la calma que me inspira...
Dormir en tu piel...como aquel día...y que no me vengas a despertar...
Quítame los miedos...cura mis heridas...devuélveme las ganas de morirme de ganas...
De rozar las estrellas con la punta de los dedos cuando me acarician tus palabras...
De gritar...por dentro...que te quedes para siempre en mí y no te vayas jamás...
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Me encanta.
ResponderEliminares verdad que no se puede evitar
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