...No quiero mía la palabra hueca...
La que llena de ecos el silencio sin decir nada...
La que atropella con su protagonismo orlado de prepotencia...
La que emborrona la calma cuando las demás callan...
No es mía la palabra injusta...
La que resonando en la mentira difama...
La que rasga la piel abriendo la herida...
La que con su impiedad maltrata...
Solo quiero mía la palabra que sana...
La que ilumina mostrando caminos...
La que acompaña siendo el apoyo que falta...
La que no cede al impulso que no sabe de medidas...
La que reconforta con delicadeza sublime el alma...
Solo la que define dando forma a los sentimientos...
La que tiembla palpitando en el filo de la emoción...
La que envuelve...
La que refugia...
La que acaricia...
La que refugia...
La que acaricia...
La que espera...
La que da vida...
La que ama...
La que da vida...
La que ama...
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